El fin de semana pasado, Sergio Berni retomó sus funciones como ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, después de haberse tomado licencia para tratarse las lesiones por la golpiza que, el 3 de abril, le propinó un grupo de colectiveros que reclamaban por el asesinato del chofer Daniel Barrientos. Su regreso incluye también la vuelta al ruedo electoral, con intenciones de incidir en las definiciones. Berni promueve que haya PASO en el Frente de Todos, muestra sintonía con los precandidatos Daniel Scioli y Eduardo De Pedro, no descarta encabezar listas propias como postulante presidencial e intenta que su esposa, la diputada Agustina Propato, se imponga como candidata a intendenta de Zárate, su distrito de residencia, que está envuelto en una compleja interna oficialista.
Berni tuvo licencia hasta el viernes 26 de mayo, durante 18 días. En ese lapso, se ocupó de cuestiones médicas derivadas del ataque de los colectiveros que sufrió en la avenida General Paz. “Tenía que realizarse un tratamiento en la nuca, donde le habían dado piedrazos. [El día del ataque] lo atendieron en el Hospital Churruca. Tuvo mala sutura, por lo que tuvieron que abrir y limpiar. El otro problema es una fractura de maxilar, que también se la trató, no tuvieron que operarlo”, resumió un hombre de confianza de Berni, en diálogo con LA NACION. “Regresó con todo, cumpliendo su función de ministro y dando discusiones políticas”, describió.
“Sergio no entendía por qué no hubo PASO en 2021. Está convencido de que lo mejor que puede pasar es que haya internas, por lo menos a presidente. Tiene una excelente relación con Scioli y con Wado. Construyó un muy buen vínculo con Kicillof. Si el gobernador va de candidato en provincia de Buenos Aires, él lo apoyará. Berni tiene ambiciones personales, como cualquier militante del peronismo debe tener. Está atento a las definiciones y entusiasmado para participar de la interna presidencial, ya que se estima que no hay manera de que no haya interna”, aseveró la fuente consultada. El informante recordó que Berni suele reunir avales y presentó listas en las últimas contiendas del PJ.
“Es kirchnerista de paladar negro y juega hasta el final. Se enojó en 2021 porque se había aceptado a Alberto Fernández, pero después no hubo PASO. Ahora tiene el diálogo normalizado con Cristina y Máximo Kirchner”, afirmaron en el entorno de Berni.
Una fuente del gabinete de Kicillof señaló que el titular de la cartera de Seguridad bonaerense “está totalmente activo, recuperado y en óptimas condiciones” y que “tendrá su tiempo en la mesa de decisiones final, porque es un jugador importante”.