El ex vicepresidente de la Nación Amado Boudou pasó el día de “Nochebuena” en el complejo penitenciario de Ezeiza, donde está detenido por el caso de corrupción de la ex Ciccone Calcográfica. Desde la cárcel, el dirigente kirchnerista defendió su condición: “Estoy convencido que estoy preso por todo lo bueno que hice en el Gobierno y todo lo malo que no hice".
Boudou, que está cumpliendo una condena de 5 años y 10 meses de prisión tras ser encontrado culpable por “cohecho pasivo” y “negociaciones incompatibles con la función pública”, advirtió que su situación “no es un orgullo”, pero aclaró que está “fuerte y en paz”.
“Realmente pienso muchos en mis hijos y estoy explicándoles esta situación. Hacia adelante, me importa la opinión de mis compañeros y compañeras. Las detenciones tienen que ver con que pude mantenerme fiel a lo que hay que hacer y lo que no”, contó.
Al ser consultado sobre cómo está transitando las fiestas, Boudou dijo que “la Navidad pone en perspectiva la situación de encierro y a los amigos y la familia, de no poder estar con los que uno quiere”.
“Realza una cosa que sucede todos los días”, comentó en diálogo con radio El Destape. Según relató, ayer fue el día de las visitas en el penal de Ezeiza y mantuvo un almuerzo navideño junto a su familia e hijos: “Es un momento muy lindo para compartir y que no atraviesen las cosas del dolor, sino de la esperanza y el amor”.

