La Policía Bonaerense fue a arrestar al hampón, acusado de balear a un chico de 16 años. Resistió con sus pistolas y lo acribillaron. Tenía pedido de captura por homicidio.
Miguel Ángel Villalba Pintos, alias “Tiro Loco”, de 40 años, murió ayer lunes por la noche, acribillado por la Policía Bonaerense, la última danza de un picante, un jugado. La fuerza provincial sabía de su fama y despachó un equipo de asalto conformado por personal del GAD y la Comisaría N°14 para arrestarlo en su rancho de la calle 158 en Melchor Romero por un hecho ocurrido 11 días atrás, cuando supuestamente, le disparó a un chico de 16 años junto a dos cómplices en una pelea tras un partido de fútbol barrial en su zona, un caso investigado por la fiscal Cecilia Corfield de la UFI N°15. La primera bala que impactó rozó al chico en la cintura. La segunda le atravesó la mano izquierda.
Entonces, fueron anoche por Villalba Pintos. El delincuente salió armado al ver los estrobos de los patrulleros, una pistola en cada mano, una Glock y una Bersa, ambas calibre 9 milímetros. Un sargento que iba tras él, irónicamente, recibió un tiro en la mano derecha. La bala también lo atravesó.
Entonces, el fuego aumentó. “Tiro Loco” murió con sus pistolas. La casa del hampón fue allanada, se encontró un chaleco antibalas, además de 75 balas y un poco de droga, 45 bolsitas de cocaína estiradas con bicarbonato y loratadina.