Los rugbiers arribaron a bordo de un micro custodiado a Villa Gesell donde el juez David Mancinelli definirá si continuarán con prisión preventiva.
“Se van a pudrir adentro”, los rugbiers detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa fueron increpados al llegar a Villa Gesell.
Este jueves tendrá lugar en Villa Gesell una audiencia clave para definir si los rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa ocurrido en la madrugada del 18 de enero continuarán con prisión preventiva.
Durante el encuentro, que comenzó a las 9 en el juzgado de Garantías de la localidad balnearia, tanto la defensa de los acusados, a cargo de Hugo Tomei, como la querella, encabezada por Fernando Burlando, y la fiscal del caso, Verónica Zamboni, expondrán sus argumentos ante el juez David Mancinelli, a quien le realizarán diferentes planteos y darán su versión de los hechos, antes de que el magistrado resuelva la situación procesal de los detenidos.
Al la puerta del juzgado, que se encuentra ubicado en el Boulevard Silvio Gesell y Paseo 130 donde además la Policía montó un vallado y un operativo de seguridad, se acercaron algunos vecinos y recibieron a los imputados al grito de “asesinos” y “se van a pudrir adentro”.
Zamboni consideró que los ocho detenidos “tenían plena conciencia y conocimiento de que habían causado la muerte de Fernando pese a ellos, todos huyeron del lugar y se escondieron”. “No solo despreciaron la vida de Fernando, al agredirlo, pegándole vivo e inconsciente, sino que también huyeron para lograr la impunidad del hecho, sin siquiera intentar auxiliarlo en el momento que cayó al suelo”, escribió la mujer al respecto del brutal ataque en el pedido de prisión preventiva de 251 páginas
