Lo decidió una jueza criticada por haber liberado el año pasado a tres motochorros con antecedentes que volvieron a ser arrestados por delinquir.
Pablo Méndez, Un policía de la Ciudad, se tiroteó el sábado con tres delincuentes tras ser asaltado en el barrio de Nueva Pompeya y uno de los ladrones murió.
La causa quedó a cargo de la jueza del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 62, Patricia Susana Guichandut, quien solicitó la detención del policía hasta tanto se determine que disparó en defensa propia y bajo todos los requisitos que dispone la ley.
El hecho se registró cerca de las 6.30 en Avenida La Plata al 2300, cuando el efectivo estaba de civil en una parada de colectivos esperando para regresar a su vivienda y fue interceptado por tres ladrones armados con fines de robo.
Ante esa situación, el policía se identificó como tal y comenzó un enfrentamiento a tiros con los delincuentes en el lugar.
Fuentes policiales informaron a Télam que uno de los asaltantes quedó tirado dentro del vehículo en que se desplazaban con una herida de bala en el abdomen, por lo que fue trasladado de urgencia al hospital Argerich, donde murió, mientras que los cómplices huyeron corriendo.
La jueza Guichandut es la misma que en 2019 ordenó la liberación de tres motochorros en menos de dos semanas, quienes volvieron a delinquir y fueron arrestados otra vez.
Uno de los delincuentes que liberó en esa ocasión fue Jair Stevens Jurado Mora (25), quien había sido detenido luego de robarle un iPhone 7 a una joven de 18 años.
Mora tenía antecedentes por hurto, tráfico de armas y violencia intrafamiliar en Colombia, pero la jueza le concedió una "probation" y le indicó que debía pagarle 700 pesos a la víctima.
