El ladrón había sido apresado el 8 de diciembre por robo, pero un juez lo liberó al día siguiente. Este sábado, en Boedo, asaltó a un chofer de taxi que intentó resistirse y se trepó al auto. En la huida, el delincuente embistió a otro vehículo y provocó la muerte del hombre. Imágenes sensibles.
Este sábado, en el barrio porteño de Boedo, un taxista viajó trepado al capó al resistirse al robo de su auto. El ladrón escapó a toda velocidad y chocó violentamente contra otro vehículo, lo cual provocó la muerte del hombre asaltado.
Se trata del mismo ladrón que el 8 de diciembre había sido apresado por efectivos de la Comisaría Vecinal 1D en Chacabuco y Alsina con una moto robada, hecho por el que estuvo detenido apenas 24 horas.
El robo al taxista ocurrió este sábado pasadas las 11 horas, cuando el conductor se detuvo en la avenida San Juan y Pichincha para comprar en una panadería y fue abordado sorpresivamente por el agresor cuando bajaba del rodado.
El taxista, ante esta situación, intento resistirse y se subió al capó del auto. El imputado arrancó y manejó a gran velocidad con el damnificado trepado al vehículo por la avenida Garay hasta el cruce con Maza, donde impactó contra un Peugeot 206.
Luego del choque, el ladrón intentó escapar a pie e incluso quiso robar una moto, pero al no poder encenderla la dejó tirada en el asfalto. Finalmente, en Tarija al 4200, fue reducido por efectivos de la Comisaría Vecinal 5B.
Intervino en el hecho el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional número 7, a cargo de Omar Peralta, quien ante la Secretaría número 121 de la Dra. Silvina Damiano, dispuso la detención del delincuente.
Cuando el personal policial introdujo sus datos, el sistema arrojó que el 8 de diciembre había sido detenido en la intersección de calles Chacabuco y Alsina empujando una moto Honda Xr 250 robada.
El detenido, al ser interrogado por el personal policial, negó tener los documentos del vehículo. A los pocos minutos se hizo presente un joven de 25 años que señaló que la moto era de su propiedad y que se la habían robado en Perú e Hipólito Yrigoyen, donde se encontraba estacionada.
En caso intervino el Juzgado Criminal y Correccional Nro. 5, a cargo de Manuel de Campos, que ordenó la detención y al otro día dispuso la liberación desde la Comisaría Vecinal 1D.
