Eso dijo la titular del Instituto Nacional contra la Discriminación tras la polémica que se desató por los audios viralizados donde le ofrece un puesto público a su empleada doméstica.
La titular de la INADI, Victoria Donda, está imputada en la justicia federal por haber ofrecido un cargo público a su empleada doméstica y, según dijo, ahora puso a disposición su renuncia, pero el presidente no se la aceptó. Además, le había ofrecido a la mujer un plan social, cuyo fin, según los abogados de la trabajadora, era para resarcirla y no pagar indemnización.
"Es cierto que le propuse a Arminda que entrara en el Inadi, y lo volvería a hacer. Pero mi intención fue ayudar, y no pagar desde el Estado lo que me corresponde a mí como empleadora", dijo la funcionaria.
Además, la ex diputada desmintió que su empleada no estuviese registrada y apuntó contra los abogados: "Eso lo dicen los abogados de ella, que son inescrupulosos. Cualquiera de nosotros puede ser víctima de un abogado inescrupuloso. Arminda es víctima de una abogado de ese tipo."
Por su parte, el Presidente, que según Donda no aceptó la renuncia, dijo: "Quien la conoce a Victoria sabe no tiene que ver con su naturaleza con sacar ventaja de los puestos del Estado. Estamos hablando de una señora que trabajó en casa de su mamá de crianza, que cuidó a su mamá de crianza, que la cuidó hasta su muerte, a quien le propone trabajar con ella. Hasta que le dice que no puede seguir trabajando."
