La semana pasada, el intendente municipal Gustavo Arrieta visitó nuevamente la cooperativa Frigocarne de Máximo Paz -que volverá a producir- para entregar un aporte del gobierno municipal, para las 140 familias que protagonizan el emprendimiento productivo. Por otro lado, el mandatario presentó al frigorífico “El Chillén” como una nueva industria que se asentará en el polo industrial.
FRIGOCARNE
Arrieta en reunión con los obreros, destacó "La importancia de la lucha por el mantenimiento de las fuentes laborales de altísimo impacto para la comunidad de Máximo Paz y entregó en la víspera de la Navidad asistencia alimentaria para las familias que aún esperan el inicio de las actividades y la consiguiente generación de ingresos genuinos".
Junto al Secretario de la Cooperativa Miguel Saavedra, el delegado de Máximo Paz, Julio Stur, el secretario de Gobierno, Emilio Contreras y miembros del Ejecutivo Municipal, evaluaron las últimas actuaciones del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social que ha retrotraído una medida anterior y restituido la matricula que permite que más de 140 trabajadores regresen a sus puestos laborales como consecuencia de la populosa asamblea realizada, el proyecto de resolución del Honorable Concejo Deliberante de Cañuelas, la sanción de la norma en la Cámara de Diputados de la Nación, el acompañamiento del Gobierno local, el apoyo de la comunidad y el empuje incansable de los que conforman la cooperativa ha logrado que antes del fin de año se pueda volver a faenar y producir en Máximo Paz.
EL CHILLÉN
En el Palacio Municipal, junto a la jefa de Gabinete, Marisa Fassi, el jefe comunal presidió la celebración de un acta compromiso que permitirá el desembarcó de la empresa “El Chillén” en Cañuelas.
En dicho establecimiento, “El Chillén” se encargará, en su fase inicial, de procesar la bilis vacuna que recolecta en los frigoríficos, incorporarle valor agregado al subproducto y posteriormente exportarlo a Nueva Zelanda para uso farmacéutico.
El acto sirvió para suscribir el acta compromiso de cesión de tierras entre la empresa Anaforja S.A., propietaria del derecho de uso de una parcela de la Zona Industrial, y la compañía que apuesta por Cañuelas y su potencialidad agroganadera para abrir las puertas y proyectarse al mundo.
Suscribieron el documento el intendente Arrieta, Gustavo Marcos (“El Chillén”) y Ángela Fusco (Anaforja S.A.). Por su parte, mediante la Oficina de Empleo municipal, “El Chillén” se compromete a priorizar la contratación de personal de Cañuelas para ocupar los puestos laborales que genera esta nueva planta.

