En su gimnasio de la calle Ferrari de Brandsen, el extricampeón mundial de boxeo Juan Martín “Látigo” Coggi, devenido en entrenador, continúa por la senda de la formación de campeones.
Semanas atrás, su pupilo Nicolás “Titán” De León, se transformó en el nuevo campeón argentino de a categoría ligero tras vencer en Hurlingham a José “Chinito” Acevedo por knock out en el séptimo asalto.
En esta oportunidad, le tocó el turno a Andrés “La maquinita” Sosa, quien el pasado sábado por la noche retuvo el título sudamericano súper gallo luego de ganarle por puntos en un fallo divido a Ckari Cani Mansilla en un combate disputado en la localidad de La Cautiva, provincia de Córdoba.
El púgil oriundo de Junín –que también es preparado físicamente por su coterráneo Ariel Castillo, uno de los integrantes del Team Coggi- continúa por la senda de los invitos, ya que ganó los once combates que disputó, siete de ellos por KO.
Durante la intensa pelea, a diez rounds, el pupilo de Látigo tiró al cordobés tres veces en el segundo asalto, aunque la tercera caída, que hubiera definido el pleito, no fue considerada por el árbitro. Los jueces fallaron 96 y 1/2 a 92 y 1/2 y 97 a 91 y 1/2 para Sosa y 95-94 para Mansilla.
Ahora vendrán unos días de descanso para el team, que no lo serán tanto porque continúa la preparación de los otros púgiles que asisten al gimnasio. Además, sigue el entrenamiento para los efectivos de la Jefatura de Policía de Seguridad de Brandsen, a quienes desde hace meses les da clases voluntarias para mejorar la performance de cada uno de ellos.
Dos grandes satisfacciones se llevó “Látigo” Coggi en las últimas semanas, que seguramente no serán las últimas. Él heredó de su entrenador, Santos Zacarías, la disciplina y la minuciosidad, algo indispensable en la formación de boxeadores
